Finalmente no se realizó la reunión que estaba prevista entre la dirigencia de ATE con funcionarios provinciales por el mentado reclamo de recomposición salarial.
Los hechos que son de demonio público fue la excusa de las autoridades del Gobierno de Tierra del Fuego para postergar, sin fecha aún establecida, el cónclave que había generado importante expectativas en los trabajadores estatales.
Todo parece indicar que la presente semana finalizará sin que el Gobierno dé señales concretas de la posible reunión con la dirigencia de ATE; y la próxima semana presentará un escenario distinto, con delegados de trabajadores estatales definiendo acciones a seguir, con un Ministro de Economía terminando su gestión, con otros funcionarios amenazando con descuentos en caso de medidas de fuerza, y el mes de octubre que finaliza sin que desde la Dirección de Estadísticas y Censo se hayan dado a conocer los valores de IPC y CBA correspondientes al mes de septiembre.
Claro, no hace falta, con solo mirar los precios de los productos en las góndolas de los supermercados nos damos cuenta que cualquier dato oficial en Tierra del Fuego será distinto a la realidad: tomate $10, asado $48, por ejemplo. Mientras tanto, el Gobierno de Fabiana Ríos sigue adelante con la única acción clara de su gestión: no aumentar los salarios de los empleados públicos, única variable de ajuste utilizada por este Gobierno, que dice sentirse identificado con el Gobierno nacional, pero que va a contra mano de la gestión de Cristina Fernández, justamente en lo que mas resalta la Presidenta de la Nación: la recuperación del poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores.
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