Las delicadas negociaciones que venía llevando a cabo el líder de la CGT, Hugo Moyano, con el titular de la CTA, Hugo Yasky, para que el Gobierno reconozca de alguna manera a esa central obrera, están paralizadas por la feroz interna que atraviesa la organización fundada por Víctor de Gennaro.
Así lo reconocieron desde la misma CGT a La Política Online. “Yasky tiene contactos indirectos con Moyano, pero ahora la propia CTA las paralizó hasta que se definan sus nuevas autoridades”.
El 23 de septiembre se vence el mandato de Yasky que comenzó hace 4 años. Ese jueves los 1,3 millones de afiliados votarán de manera secreta a más de 15.000 representantes, entre autoridades nacionales, provinciales y las seccionales.
El actual titular de la central de trabajadores enfrentará a corriente Germano Abdala, que lidera De Gennaro, pero aún no sabe quiénes serán los nombres impresos en esa lista. Se definirán el 31 de julio en el microestadio de Ferro, contó De Gennaro y anticipó: “Yo no voy a ser candidato porque tienen que asumir los jóvenes en esta nueva década”.
La interna
Lo que se discute en la CTA es su relación con el Gobierno. “Yasky representa a los sectores que prefieren una corta pero prudente distancia del kirchnerismo y De Gennaro mantiene una postura más intransigente”, sintetiza un dirigente gremial que aún no definió de qué lado está.
El primero, cuenta en sus filas con Roberto Pianelli del sindicato de los trabajadores del Subte y con Claudio Marín, de los telefónicos de FOETRA. Algunos descuentan el apoyo de Milagro Sala, líder de la agrupación Tupac Amaru de Jujuy con conocidos contactos con la Casa Rosada.
Yasky no es el único con pesos pesados. De Gennaro mantiene de su lado a Claudio Lozano, diputado nacional de Proyecto Sur, Pablo Micheli, titular de ATE, José Rigane, de Luz y Fuerza de Mar del Plata, Daniel Jorajuría de gastronómicos que enfrenta a Luis Barrionuevo, Juan Carlos Giuliani, secretario de Prensa de la CTA y Alberto Piccinini, secretario adjunto de la UOM de Villa Constitución, quien organizó el último plenario de la agrupación en su ciudad.
Allí se criticó la actitud “complaciente con el Gobierno”, se pidió “tomar una clara distancia del kirchnerismo”, y acusaron a la conducción de la CTA de permitir que el Gobierno se “adueñe” y “desvirtúe” varias de las banderas que históricamente levantó la CTA, “como la asignación universal por hijo y la estatización de las AFJP”, contó un militante que participó del encuentro.
Negociaciones secretas
Según fuentes sindicales lo que Yasky negocia con Moyano es el histórico reclamo de personería gremial que la central de trabajadores viene haciendo desde su fundación, en 1992.
Así es que se los vio juntos y abrazados en cuatro oportunidades en los últimos meses. Se movilizaron a Rosario por el despido de trabajadores del diario La Capital, al Poder Judicial para defender la Ley de Medios, a Córdoba y Neuquén contra la criminalización de la protesta. Tan fuerte la imagen de ambos dirigentes juntos que se habló de “unificar” las centrales obreras.
Sin embargo, Yasky negó rotundamente que se reúna con Moyano, ni que piense en una unificación.
“Sólo tengo encuentros en manifestaciones, son actos episódicos donde se deja de lado las diferencias de las centrales y se pone al frente al trabajador”, dijo sintético. “Jamás me reuní con Moyano, eso es puro cuento”, señaló y aclaró: “Nosotros planteamos una unidad en la acción frente a hechos concretos, pero nunca podríamos hacerlo en la estructura –explicó- Nosotros peleamos por una organización democrática, donde las autoridades se elijan de manera directa y no que lo hagan sólo unos tres o cuatro secretarios, y en la que se afilie individualmente y organizaciones sociales”.
Tan dura es la interna que en la CTA no descartan que la elección termine en escándalo y con violencia. Por eso acordaron bajar el tono. Temen una fractura y que la personería gremial sólo alcance a un sector. Pero también entienden que “una ruptura de la central sólo favorecería a Moyano que quiere quedarse con todo el poder sindical y no se le va a hacer el juego a eso”.
Fuente: lapoliticaonline.com.ar