Desde la Agrupación Nacional Unidad y Solidaridad ATE queremos manifestar la necesidad de un marco donde discutir las cuestiones de fondo de los empleados estatales.
Esta vez nos ocupa particularmente la situación de los empleados municipales, desde donde se viene manifestando hace más de tres años la imperiosa necesidad de implementar un ESTATUTO del EMPLEADO MUNICIPAL y el correspondiente concurso por los cargos a ocupar.
En el año 2006 por esta falencia se dio una situación mas que particular en el Cementerio Local, donde se solicito al Concejo Deliberante acompañamiento, el 17 de Noviembre de 2008 la justicia falló dándoles la razón a los trabajadores, pero el Ejecutivo Municipal hizo caso omiso. Siguiendo con este tipo de prácticas inconstitucionales, que violan la libertad y democracia sindical.
Sostenemos que los trabajadores deben ser tomados como tal, en un marco de respeto e igualdad, porque no solo son prestadores del servicio, son contribuyentes igual que toda la comunidad.
¿Es casualidad que los cuatro trabajadores que intentaron apartar en el vivero municipal son los que prestaron declaración en el escándalo del paseo Pacheco? ¿Es casualidad también que el presupuesto del vivero de 700.000 haya pasado a 1.800.000 pesos en el ultimo año?
Vemos con preocupación como el municipio de Río Grande permite y apaña la actitud de directores de áreas o Jefes políticos en este accionar contra la clase obrera. Desoyendo no solo la constitución nacional y provincial, sino la carta orgánica de la ciudad y los derechos y deberes que ésta otorga tanto al ejecutivo como a los empleados municipales.
No podemos seguir permitiendo esta actitud, ya solicitamos la intervención al Cuerpo Legislativo y creemos que el Concejo Deliberante cuenta con las herramientas para frenar el accionar extralimitado del municipio local.
Los trabajadores no podemos seguir estando en el medio de prácticas políticas que atentan contra el estado. Porque el estado somos todos.
Después de una gestión cumplida y a dos años de terminar el segundo mandato, la gestión Martín no ha resuelto ni ha demostrado interés en resolver este tipo de conflictos, propiciando el despojo de derechos a los compañeros del sector por falta de normativa. Ya que en la actualidad las relaciones laborales se rigen por la famosa 22.140, Ley de la época del proceso militar y que casualmente es la única municipalidad del país que la aplica.
Por eso desde la ANUSATE estamos convencidos que es necesario el consenso de las partes reflejado a través del Convenio Colectivo de Trabajo.
Esta vez nos ocupa particularmente la situación de los empleados municipales, desde donde se viene manifestando hace más de tres años la imperiosa necesidad de implementar un ESTATUTO del EMPLEADO MUNICIPAL y el correspondiente concurso por los cargos a ocupar.
En el año 2006 por esta falencia se dio una situación mas que particular en el Cementerio Local, donde se solicito al Concejo Deliberante acompañamiento, el 17 de Noviembre de 2008 la justicia falló dándoles la razón a los trabajadores, pero el Ejecutivo Municipal hizo caso omiso. Siguiendo con este tipo de prácticas inconstitucionales, que violan la libertad y democracia sindical.
Sostenemos que los trabajadores deben ser tomados como tal, en un marco de respeto e igualdad, porque no solo son prestadores del servicio, son contribuyentes igual que toda la comunidad.
¿Es casualidad que los cuatro trabajadores que intentaron apartar en el vivero municipal son los que prestaron declaración en el escándalo del paseo Pacheco? ¿Es casualidad también que el presupuesto del vivero de 700.000 haya pasado a 1.800.000 pesos en el ultimo año?
Vemos con preocupación como el municipio de Río Grande permite y apaña la actitud de directores de áreas o Jefes políticos en este accionar contra la clase obrera. Desoyendo no solo la constitución nacional y provincial, sino la carta orgánica de la ciudad y los derechos y deberes que ésta otorga tanto al ejecutivo como a los empleados municipales.
No podemos seguir permitiendo esta actitud, ya solicitamos la intervención al Cuerpo Legislativo y creemos que el Concejo Deliberante cuenta con las herramientas para frenar el accionar extralimitado del municipio local.
Los trabajadores no podemos seguir estando en el medio de prácticas políticas que atentan contra el estado. Porque el estado somos todos.
Después de una gestión cumplida y a dos años de terminar el segundo mandato, la gestión Martín no ha resuelto ni ha demostrado interés en resolver este tipo de conflictos, propiciando el despojo de derechos a los compañeros del sector por falta de normativa. Ya que en la actualidad las relaciones laborales se rigen por la famosa 22.140, Ley de la época del proceso militar y que casualmente es la única municipalidad del país que la aplica.
Por eso desde la ANUSATE estamos convencidos que es necesario el consenso de las partes reflejado a través del Convenio Colectivo de Trabajo.
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